La única comparación posible
Cuando nos vemos frente al espejo, tendemos a compararnos con los demás: «estoy más gordo que Pedro», «tengo más arrugas que María» o «hasta cuándo ganaré menos dinero que Irene». La imagen que proyectamos es siempre fuente de conflicto interior. Los espejos existen desde hace siglos, pues eran utilizados por egipcios, griegos o romanos. Incluso …